Condenados a eternizar su vida de allegados en casa de familiares, lxs deudores de la educación comienzan el circulo vicioso de la miseria, con trabajos precarios en muchos casos, o mal pagados en aquellos en donde pueden desempeñar lo que aprendieron por su paso en la universidad. Y es así como año a año los jóvenes que ingresan a las cientas de universidades ven hipotecado su futuro y mientras la vida se les acaba, con un Gobierno que sigue sin entender que se está matando financiera y culturalmente a toda una generación, quienes ya no quieren estudiar Artes y Letras, no desean ser actores, profesores, poetas o escritores, pues con los miserables sueldos de esas carreras difícilmente podrían pagar las millonarias cifras infladas y abultadas por el negocio de la deuda de la educación. Mataron a toda una generación de artistas, destruyeron la generación de cultura, nos condenaron a una sociedad mercantil, en donde manda el dinero que ganes, y no tus capacidades.
Cavallero, L., & Gago, V. (2021). A feminist reading of debt. London: Pluto Press.